En esta época en la que estamos tan acostumbrados a usar dispositivos con pantallas, gran parte de nuestro tiempo, podemos llegar al punto de sentirnos saturados. Es por eso que ahora retoman importancia actividades de ocio o pasatiempos que sean libres de dispositivos o que al menos nos hagan enfocar la mirada en algo más que una pantalla.
Tejido, bordado, costura y fieltro agujado
Si tejer no llama tu atención, puedes optar por una actividad similar, pero que involucra ser más detallado, como el bordado. Para ello es necesario contar con una tela, aguja e hilos de bordar. Se empieza por calcar un patrón sobre una tela, que para principiantes se recomienda sea manta o similar. Al igual que para el tejido, hay revistas y libros que explican las puntadas que se pueden usar para darle vida al dibujo calcado.
La tercera opción relacionada con los textiles es la costura, esta actividad si requiere una mayor inversión si se compara con las otras, pues se necesita de una máquina de coser, telas, una cinta para medir, tijeras e hilos. Esta actividad puede exigir más paciencia porque hay que aprender a manipular la tela al pasarla por la aguja de la máquina. Por eso se recomienda empezar trazando una línea recta sobre un pliego de papel periódico y pasarlo por la máquina hasta que se logre coser totalmente alineado sobre el papel.
Por último, en esta categoría quiero hacer mención del fieltro agujado, es una técnica que consiste en punzar fibras de lana, uniéndolas para dar formas. Se pueden combinar distintos colores y ser tan detallado como se quiera y la imaginación es el límite. Con distintas formas puede crear animales, objetos o muñecos, el límite es la creatividad.
Colorear, dibujar y pintar
Si, por otro lado, le llama más la atención usar lápices, propongo tres opciones: colorear, dibujar y pintar. La más sencilla de todas es colorear, la recomendación es procurar hacerse de unos lápices suaves, aunque cualquier juego de lápices de colores que tengas cumple su función. En cuanto a qué colorear, en el mercado hay libros hechos para adultos y lo que determina la complejidad de la actividad es el detalle en los dibujos, pero si no estás seguro de que es para ti empieza por imprimir algunos dibujos para ver que tanto te gusta la actividad.
Si quieres algo un poco más retador, este puede ser un buen momento para aprender a dibujar y no
necesitas necesariamente tomar clases, puedes hacerte de un libro que explique los conceptos básicos del dibujo y que brinde instrucciones para empezar desde cero, y por supuesto vas a necesitar lápiz, un borrador y un tajador.
Pintar es otra actividad por la que puedes optar en esta categoría. La pintura puede ser más libre que el dibujo, pues con los colores puedes plasmar más que formas definidas. Esta actividad también puede ser terapéutica y no necesariamente tienes que producir algo muy complejo para disfrutarla. Para comenzar son buenas opciones las pinturas de acuarela y las de acrílico, puedes buscar papel de un gramaje que resista la pintura si aún no quieres gastar en un lienzo. Comprar un caballete no es necesario para empezar, pero si permite que la actividad sea más cómoda.
Leer, escribir, lettering y caligrafía
Si tus intereses están más relacionados con las palabras, aparte de leer hay dos opciones más, escribir y hacer lettering, pero antes de hablar de ellas quiero hacer unas recomendaciones sobre cómo hacer la lectura una actividad más frecuente. Si te es difícil sentarte a leer por horas, ya sea porque no cuentas con mucho tiempo o porque te es difícil mantener la concentración, hay varias formas de lograr que la lectura sea parte de tu vida de forma sencilla.
Para empezar me gustaría aclarar que no todos los libros son para todos, y que hay libros más fáciles de leer. La dificultad de un libro se puede notar al leer sus primeras páginas, si comprender lo que se está narrando sucede casi de forma instantánea, quiere decir que es un libro que no requiere de mucho esfuerzo mental, sí, por el contrario, te encuentras releyendo párrafos porque no entiendes o pierdes el hilo muy rápido, entonces se trata de un libro que tiene un nivel exigencia mayor y necesitas mayor poder mental para leerlo.
Con lo anterior no quiero promover que se descarten los libros más difíciles o pesados, sino que tomes en cuenta que puede ser un factor que te haga caer en un bloqueo lector. Estos libros quizás sea mejor leerlos de a poco y en momentos donde cuentes con bastante energía. Tal vez pienses que entonces no vas a leer mucho de esa forma, lo que te propongo es leer más de un libro a la vez, esto porque es bueno tener varias opciones según como te sientas a cada momento.
El tamaño del libro también afecta nuestras elecciones, un libro grueso quizás cause intimidación y uno angosto nos puede dar la falsa ilusión de que se leerá rápido. Cualquiera que sea el caso, dale una oportunidad al libro sin importar el tamaño y júzgalo después de leer unas páginas. Por último, volviendo a lo de que no todos los libros son para todos, si un libro no te está enganchando, ten en cuenta que está bien no terminar un libro. Hay muchos libros, no tiene sentido estancarse con algo que no te gusta.
Filigrana, scrapbooking, art journaling, modelos en miniatura
La combinación de papeles y/o cartón nos dan otro conjunto de actividades: filigrana, scrapbooking y modelos en miniatura. La filigrana es una manualidad que consiste en hacer rollos con tiras finas de papel creando formas con la ayuda de plantillas, creando formas básicas que juntas pueden crear diseños más complejos. En el mercado hay kits básicos y patrones para empezar con esta actividad.
El scrapbooking comenzó como una técnica para personalizar álbumes de fotografías por medio de recortes de papel con diferentes diseños y texturas. La técnica ahora no se limita a solo eso y puede
aplicarse a otro tipo de cosas, por ejemplo, personalizar y decorar un libro de recetas. Los materiales son tantos como se quieran, pero lo mínimo que se necesita es papeles decorados y/o lisos, goma y tijeras. Se pueden comprar herramientas para crear distintas formas y texturas, cintas washi, calcomanías, rotuladores y otros materiales, no hay límite.
El art journaling aplica mucho de lo explicado anteriormente para el scrapbooking, la diferencia es que este requiere de un cuaderno donde se colocan los papeles y otros materiales de forma que se crea un collage, se puede usar texto o no, sea escrito o impreso, realmente no hay límite en lo que se pueda colocar siempre y cuando sea plano, si el papel lo resiste incluso se puede usar acuarela.
Si de pequeño te gustaban las maquetas, los modelos en miniatura pueden ser un escape creativo, se pueden recrear escenas usando los mismos materiales mencionados anteriormente y otro más como madera, pero esta vez en forma 3D, cualquier objeto, cualquier lugar puede servir de inspiración.
Juegos de destreza mental en papel
Si lo que te llama más la atención son las actividades que retan a la mente, podemos empezar con armar rompecabezas, hasta pasar a juegos en papel como sudoku, crucigramas y sopas de letras. Además de los clásicos, hay revistas y libros con otros tipos de retos que involucran reconocimiento de patrones, uso de la lógica y la matemática, conocimientos de historia o literatura y otras áreas. También hay juegos tridimensionales cuyo objetivo es acomodar las piezas de forma que se resuelvan los retos que se presentan.
Punto cruz diamante
Este quizás sea el pasatiempo más sencillo, ya que no requiere otra cosa más que comprar set que contiene una especie de lienzo con una impresión, la cual está marcada con un código de color, engomada y cubierta por un plástico. También se incluyen varias bolsas conteniendo las piedras de fantasía comúnmente llamadas diamantes, las cuales se deben colocar siguiendo el código de color con ayuda de una herramienta llamada lápiz, la cual se presiona sobre una pequeña lámina de cera que funciona como goma para enganchar los diamantes para ser transferidos a la impresión.
Sin presiones
Todas las actividades mencionadas anteriormente presentan un reto en mayor o menor medida y la idea no es que sean causa de estrés, sino una forma de desconectar y relajar la mente. Al principio va a parecer que no hay avance, pero la clave es ser consistente y eventualmente la mejora será notable, los primeros intentos serán la evidencia del progreso y no fracasos. También hay que tener en cuenta que no es necesario contar con herramientas y materiales costosos y profesionales, para empezar solo se necesita lo mínimo, en especial porque al principio podemos pasar por una fase de exploración hasta encontrar lo que nos guste.